(Sin título)

A los 16 años cursaba el segundo año de bachillerato en un colegio de la ciudad de Ambato. Un viernes, junto a varios compañeros después de clases, donde nos encontrábamos en el parque Cevallos a las 18 pm, decidimos ir a tomar unas cuantas cervezas en un lugar muy conocido de la ciudad.

Permanecimos hasta aproximadamente las 21 pm en dicho lugar. Posterior a ello fuimos todos a la casa de un compañero porque los papás de él no estaban en la ciudad. En el trayecto compramos licor. Al llegar al domicilio pactado llamamos a un grupo de amigas para hacer más amena la experiencia. Ellas también trajeron alcohol.

Pasada la medianoche ya todos estábamos alcoholizados y surgió la idea de viajar a la playa.

Es lo último que recuerdo. Al día siguiente desperté frente a la playa de Atacames sin saber cómo llegamos al lugar. Habíamos viajado 14 personas en una camioneta de doble cabina. Corrimos la suerte de que no sufrimos ningún accidente de tránsito y llegar a Atacames con vida.