(Sin título)

Andrés era un joven proveniente de una familia de clase media, tenía todo lo necesario en su hogar y vivía junto a sus padres. El tiempo transcurrió y Andrés cumplió ya 18 años de edad y fue hasta entonces cuando le hacía falta aquella compañía de sus padres, se sentía algo triste al saber que ellos le dedicaban más tiempo a su trabajo que a pasar tiempo con él, le hacía falta la atención que le dieron cuando aun era un niño, pues el pasaba todo el tiempo solo en su casa.

Así pasaron los días y en un momento dado Andrés decidió no estar solo en su casa y salir con sus amigos, los cuales siempre estaban con él para escucharlo. Un día decidió salir con sus amigos a una fiesta, sin el consentimiento de sus padres. Influenciado por ellos decidió beber. Al regresar a su casa, condujo su auto en estado etílico, lo que provocó en un desenlace fatal. Andrés chocó y lamentablemente quedó en coma. Sus padres al enterarse de aquella trágica noticia no podían creer lo que pasaba. Desde aquel día imparten charlas a jóvenes para evitar que ocurran situaciones como estas y también ayudando a concientizar a los padres de no dejar solos a sus hijos y siempre estar pendientes de ellos.