ELIXIRES DE TRISTEZA

En un pueblo vivía una chica llamada a Carolina junto con sus padres, quienes no llevaban una relación estable, es decir, estaban a punto de divorciarse. La razón era que su madre había engañado a su padre con su jefe de la oficina, tras esta discusión estaban en proceso de separación y posterior a esto no se fijaron en el estado emocional en el que se encontraba su hija.

Ella apenas pasaba el primer año de bachiller en un colegio de su pueblo. En poco tiempo sus padres finalmente se divorciaron, causando en Carolina una depresión que la llevó a refugiarse en sus amigos, los cuales la impulsaron a consumir alcohol supuestamente para acabar con su problema familiar.

Tras un tiempo llegó un punto en su vida en que Carolina cayó en la adicción total de este vicio. Sus padres al pasar desapercibida esta situación dejaron que Carolina siguiera hundida en la depresión y el alcoholismo.

Un día Carolina conoció a una chica llamada Elena la cual conoció su mundo del alcohol y sintió lástima de ella. Poco a poco se ganó su confianza y creció un afecto especial entre ellas. Con el tiempo esta amistad se convirtió en algo más. Al poco tiempo sus padres se dieron cuenta de la orientación sexual de su hija, ellos no aceptaron de ninguna manera esto y las forzaron a separarse.

Carolina fue llevada a otro pueblo por sus padres para perder comunicación con Elena y cayó en depresión nuevamente Decidió quitarse la vida cortándose las venas. La noticia no tardó en llegar a Elena y también decidió quitarse la vida en un puente de la ciudad.