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CASI PIERDO LO MEJOR DE MI

  • Foto del escritor: Relatos alcohólicos - UTA
    Relatos alcohólicos - UTA
  • 3 feb 2019
  • 2 Min. de lectura

La historia comienza a desarrollarse en un ambiente escolar cuando Paola, con tan sólo 16 años de edad comienza a explorar el largo camino del consumo del alcohol. Sus faltas recurrentes a la institución educativa estaban alertando a la comunidad educativa, pero nadie preguntaba porque desaparecía más de 2 días. Sus compañeros sabían la causa pero prefirieron callar usando la típica frase, la vida de ella es. Las relaciones con los demás se basaban para Paola básicamente en el consumo del alcohol.

Paola llevaba una vida artificialmente perfecta, nunca se imagino en un futuro con una dependencia al alcohol, solo se veía como cualquier chica que bebía por diversión para encajar en un grupo, pensaba que al tomar se veía cool frente a otras personas. No quería verse como una persona aburrida y por esa razón tomaba para mostrarse divertida, como una persona acaladora.

Al mantenerse en este estado de consumo Paola queda embarazada de 18 años de una niña, momentáneamente deja de beber por el embarazo pero una vez que cumple este ciclo y nace su pequeña hija recae nuevamente en este problema de alcoholismo. A causa de problemas amorosos su relación sentimental fue tóxica, desde que ella quedó embarazada su única salida a tanto dolor y desesperación fue beber. Nunca se imagino que este camino sin retorno sería el principio de un problema mayor que pondría en juego su capacidad de voluntad.

Un día Paola cómo era de costumbre deja a su hija a cargo del padre. Tenía visitas consensuadas con la niña, debía retirarla después de que se cumplieran las horas de visita pero ese día sería diferente al resto. Paola se emborrachó a tal nivel que no podía razonar el accionar de sus comportamientos y decidió ir a retirar a su hija en ese estado alcohólico. Se formó un problema tan grande entre Paola y el padre de su hija que esté decidió quitarle a la pequeña porque Paola se había salido de control con el alcohol.

Una vez que Paola recobra su sentido de raciocinio y conciencia se encuentra frente a un juez que estaba decidiendo el futuro de su hija. Ese día observó qué tan tóxica podría ser para su pequeña hija y decidió hacer una promesa; que jamás se vería en ese estado de dependencia, y cuidarse y respetarse. Ante eso, el juez le concede la custodia, y desde ese día Paola cambió por el bienestar de su hija y siempre menciona que “casi pierdo lo mejor de mi”.

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Web creada por la tutoranda Paola Acosta y el profesor Álvaro Jiménez como parte del proyecto de investigación para el tratamiento del alcoholismo en jóvenes universitarios (2453-CU-P-2017 / DIDE-UTA).

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