Anabel era una chica reservada e inocente, su sueño era llegar a ser la mejor doctora del país y para lograrlo tuvo que esforzarse mucho, al fin consiguió un cupo en la carrera que ella soñaba. Los primeros días en la universidad a Anabel le consideraban una mujer muy entusiasta e inteligente, por lo que en su aula le eligieron como presidente, sus notas eran las mejores ya que ella se concentraba solamente en sus estudios, pero un día al caminar por los pasillos de su edificio vio a un chico, al cual de tan solo verlo, quedó enamorada.
El tiempo pasó y llegaron a ser novios, al principio todo marchaba bien, los dos se encontraban ilusionados con su relación, ella un poco más que él, pero después de un año de relación todo comenzó a tomar un giro diferente, él empezó a ser muy controlador y posesivo con ella, esa relación se volvió tóxica, pero como ella lo amaba no quería dejarlo, sin saber que él le era infiel con su mejor amiga.
Ella al enterarse de esta traición dejó de alimentarse bien, solo pensaba en que su hombre le falló, empezó a perder peso, todos sus amigos notaron su cambio físico y emocional sin darse cuenta que esta decepción la estaba acabando poco a poco, desarrolló anorexia y fue, con ayuda médica y el apoyo de sus amigos y familia, que ingresó a terapia y lo logró, recuperó su amor propio y su salud.
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