(Sin título)
- Relatos alcohólicos - UTA
- 28 ene 2019
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 3 feb 2019
Marco y Pedro cursaban en su último año en el colegio. Los dos eran amigos desde la infancia, compartían muchos momentos juntos, y eran muy dedicados en sus actividades escolares. Marco era muy alegre y formaba amistades con mucha facilidad mientras que Pedro era algo tímido y en su tiempo libre prefería pasar en casa.
Una vez graduados del colegio los dos tomaron caminos diferentes. Marco decidió estudiar artes y Pedro optó por estudiar ingeniería en sistemas. Al pasar el tiempo todo era distinto, ellos ya no mantenían la misma amistad y poco a poco dejaron de hablarse.
En una ocasión se encontraron casualmente en la cafetería de la universidad y Marco decidió invitarlo a su fiesta de cumpleaños que se iba a realizar el fin de semana en una discoteca. Pedro dudó en aceptar la invitación pero al final decidió ir.
En la fiesta tomaron un par de tragos y Marco decidió volverlo a invitar a salir el siguiente fin de semana. A Pedro no le gustó la idea de salir porque era muy reservado pero en esta semana tuvo varios problemas con su familia y decidió aceptar la invitación tras la insistencia de su amigo.
Esa noche tomaron más de lo normal y al momento de llegar Pedro a casa volvió a discutir con su mamá e incluso se tornó agresivo golpeando a su hermana menor. Tras esa noche, las salidas se tornaron constantes y cada fin de semana salían a tomar alcohol. Esa situación se volvió cotidiana hasta el punto que Pedro descuidó sus estudios y tenía una mala conducta con su familia. El día del cumpleaños de Pedro su amigo realizó una fiesta sorpresa y como era de esperar, tomaron hasta perder el conocimiento.
Al momento que regresaban a casa, Marco, quién se encontraba conduciendo, se quedó dormido y tuvieron un fuerte accidente. El vehículo quedó totalmente destruido y Marcó sólo recordó que se encontraba en una ambulancia de camino al hospital sin saber lo que había ocurrido con su amigo. Luego de varias horas en el hospital él se despertó y miró a sus padres llorando junto a él. Al preguntar por la condición de su amigo le informaron la trágica noticia de que había fallecido.
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